Jesus Uriarte. Chillida lanean
Además de la utilización de una representación de una escultura de Eduardo Chillida como parte de su logotipo desde 1990, Kutxa Fundazioa ha desempeñado un papel importante en la preservación y promoción del legado de Chillida. Ha colaborado en la organización de exposiciones, eventos y actividades relacionadas con su obra y la exposición Jesus Uriarte. Chillida Lanean es un hito más.
La exposición, comisariada por Jon Uriarte, está articulada en cuatro secciones temáticas que corresponden con los cuatro materiales con los que trabajó Chillida. Esta división nos revela, más allá del trabajo del artista, las diferentes condiciones de trabajo del fotógrafo, que trata de capturar lo esencial del proceso creativo sin interferir en él, adaptándose a las diferentes características del medio de producción. En palabras del comisario, «sus imágenes desvelan los espacios, los tiempos y las personas involucradas (…) desde la cercanía que existía entre ambos creadores y su colaboración continuada en el tiempo».
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Tierra
En 1995 Jesus Uriarte viajó al taller del ceramista Hans Spinner en Grasse, Francia, donde Eduardo Chillida realizaba las esculturas con tierra (Lurrak). El fotógrafo tuvo que ganarse poco a poco su lugar. Las fotografías de aquellos días incluyen puntos de vista lejanos y respetuosos, así como otros cercanos. Uriarte logra captar la concentración del artista, pero también el juego y la buena sintonía con Spinner.
Papel
Chillida creaba sus dibujos, collages y gravitaciones en Villa Ingeborg en San Sebastián. El acceso que Uriarte tenía al espacio de creación más íntimo de Chillida le permitió fotografiar al artista mientras trabajaba, así como documentar con detalle las herramientas que utilizaba, utilizando la iluminación natural que entraba por sus claraboyas.
Acero
Jesus Uriarte fotografió la construcción del Peine del viento en 1977, años antes de empezar a trabajar con Eduardo Chillida. Sus icónicas fotografías de los operarios trabajando en condiciones adversas (mareas y golpes de mar) son testimonio de la complejidad del proceso y de las estrechas colaboraciones que el artista establecía con diferentes agentes de la industria.
Pocos años después, Jesus Uriarte empezó a trabajar con Chillida, y a documentar el proceso de fabricación en la fragua y en la forja, donde el escultor aparece acompañado de sus ayudantes Fernando Mikelarena, Marcial Vidal y Joaquín Goikoetxea, trabajando como uno más.
Uriarte debía ir adaptándose a las condiciones de este medio (fuego, movimiento, escasez de luz y limitada sensibilidad de la película) e ir tomando decisiones rápidamente. Esto era aún más necesario durante la producción de obras de acero de gran escala en forjas industriales. Allí, Jesus Uriarte documentó las complejas técnicas de forjado a altísimas temperaturas que requerían de decenas de trabajadores para dar forma a las esculturas monumentales que el escultor realizó para el espacio público.
Hormigón
La construcción de las obras en hormigón de Chillida era largo y complejo: de la maqueta, al modelo de porexpán a escala 1:1 y el encofrado en una nave industrial, para después desmontarlo y volverlo a montar en su emplazamiento final, donde se vertía el hormigón. Lógicamente requería del trabajo en equipo: el ingeniero José Antonio Fernández Ordóñez, JesusAledo con en el porexpán y el carpintero José Antonio Bereziartua con el encofrado, fueron sus principales aliados.
Uriarte documentó el proceso completo de obras como Elogio del horizonte en Gijón o el Monumento a la tolerancia en Sevilla, entre otros. Los tiempos extendidos de producción y los diferentes espacios le permitieron realizar su trabajo con más calma y anticipación. La monumentalidad de las obras le llevó, en ocasiones, a trepar a la propia pieza o subir a las grúas que utilizaban los operarios.